lunes, 20 de junio de 2011

Presentación del libro "La pasión del piquetero", de Vicente Zito Lema

Martes 21 de junio, 19 hs.
IMPA
Rawson 106, Ciudad de Buenos Aires

En el marco de la Cátedra Che Guevara
de la Universidad de los Trabajadores,
se presenta


La pasión del piquetero

de Vicente Zito Lema

Con la presencia del autor, Néstor Kohan, Alfredo Grande y Marco Teruggi.

El 26 de junio de 2002 el gobierno de Eduardo Duhalde desató una represión criminal sobre la manifestación que mantenía cortado el Puente Pueyrredón, en la que fueron asesinados Darío Santillán y Maximiliano Kosteki. Más de cuatro mil desocupados habían llegado hasta Avellaneda aquella mañana, en una jornada que dejaría además un saldo de 33 heridos de balas de plomo. La investigación sobre los hechos fue plasmada en el libro Darío y Maxi. Dignidad piquetera, publicado en el año 2003 por el Movimiento de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón. El 17 mayo de 2005 se inició el juicio por la Masacre de Avellaneda. El Frente Popular Darío Santillán mantuvo entonces un acampe durante más de 40 días. Ocho meses después, el 9 de enero de 2006, se lograría la condena de los autores materiales de la represión. Ese mismo día se estrenaba frente a los tribunales de Lomas de Zamora La pasión del piquetero, de Vicente Zito Lema, como parte de las actividades de la vigilia que llevaron adelante distintas organizaciones sociales, movimientos de desocupados, organismos de derechos humanos y agrupaciones estudiantiles.
“¿Cómo pueden la belleza y la tragedia dormir en la misma cama?”. El empecinamiento de la vida se funde, de algún modo, en la certeza de la muerte como absurdo; el empecinamiento es un absurdo –¿lo es?. ¿Qué nos empecina, qué nos lleva a rescatar del centro mismo del absurdo, imágenes claras, palabras sencillas, con las que denominamos el mundo y le otorgamos textura a la realidad, realidad que todavía, algunxs insisten en no ver? No alcanzan las metáforas, hay un algo previo que se enreda en las manos del poeta, para darle a la poesía sentido propio, de espacio conquistado, ocupado, expropiado al imperio de la vanalidad, para erigirse en “potencia reveladora” que muestra “las cosas como son”.
¿Y cómo son las cosas? Atropelladamente difusas, conmocionantes, altamente traumáticas. Cosas que necesitan de nuestras palabras e imágenes, para iluminar y que nos iluminen.
Si la investigación desarrollada en Darío y Maxi es el relato periodístico que evidenció la planificación criminal de la Masacre de Avellaneda, La pasión del piquetero es el relato poético que resuscitó la dignidad y el carácter profundamente humano de los militantes asesinados en el Puente Pueyrredón. Ambos trabajos se inscriben en una tradición que Rodolfo Walsh inaugurara con Operación Masacre, al denunciar los fusilamientos en un basural de José León Suárez tras el levantamiento del general Valle en 1956, y continuara Paco Urondo con La patria fusilada, dando testimonio sobre la Masacre de Trelew en 1972.
¿Cómo pueden abrir, en el desierto, las brillantes flores de los cactos? Empecinamiento de agua, o en palabras del mismo Vicente, “la obstinación obstinada del amor”. Obstinación del poeta en hacer de la tragedia una oda a la vida, cuando la muerte no llega, sino que irrumpe, absurda, del brazo largo del imperio para convencernos de que la lucha por la dignidad es el absurdo. Pero lejos de convencernos, nos empecina.
La publicación de esta obra, a más de 8 años de los acontecimientos, no persigue otro fin que el de continuar exigiendo justicia y cárcel a los responsables políticos de la muerte de nuestros compañeros. Sabiendo que la poesía no redime la muerte, y que la belleza ya es parte de su ejemplo, continuar su lucha es el único homenaje posible.

Del texto de Presentación del libro

No hay comentarios: